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Agosto
Como combatir el calor del verano en las personas mayores
Como cada verano, las temperaturas se disparan con un claro impacto en nuestro día a día. En determinados lugares, se añade la humedad, que acompaña y dificulta el ejercicio normal de nuestra actividad.
Cuando entramos en el terreno de la actividad y rutina de las personas mayores, tenemos que tener en cuenta que estos factores de calor, temperatura y humedad, pueden suponer un riesgo importante para su salud.
La mayor vulnerabilidad de las personas mayores ante el calor

Conforme nos hacemos mayores, tendemos a perder sensaciones de manera inmediata. La sed y el calor están entre ellas, con el peligro que supone no tener consciencia de ellas. La falta de hidratación sumada a las altas temperaturas puede llevar al tan temido golpe de calor. Es importante detectar aquellos indicios que nos llevan a pensar que estamos ante esta situación ya que, en ocasiones, la sintomatología no se aprecia y se oculta tras las patologías propias de la persona.
Como combatir el calor pensando en las personas mayores

Estos son unos consejos que ayudarán a prevenir un golpe de calor u otras situaciones de riesgo para nuestros mayores cuando las temperaturas son altas.
1.-Hidratación - Es fundamental. Durante todo el año, la ingesta de líquidos es prioritaria para las personas mayores, mucho más si nos encontramos en la época estival. Agua, zumos, refrescos, deben ser tomados a lo largo del día asiduamente. Evitar el consumo de alcohol y las bebidas con mucho gas, pues pueden crear una sensación ficticia de bienestar.
2.-Comidas ligeras- Las comidas copiosas llevan a digestiones largas y pesadas, que tienden a facilitar el aumento de la temperatura corporal. En verano, nuestros mayores deben tener una dieta más ligera y fresca, con verduras, frutas de agua, gazpachos, y con las cantidades repartidas a lo largo de día.
3.-Procurar que esa alimentación incida en la calidad del sueño- El calor, favorece el insomnio tan frecuente en las personas mayores. Una cena ligera y ejercicio suave ayudará a la mejor calidad del sueño y del descanso.
4.-El sol mejor en horas tempranas o tardías- La exposición al sol es un riesgo en verano, más durante las horas de mayor calor. Hay que evitar estar expuesto al sol el mayor tiempo posible.
5.-Habitaciones frescas- La opción es permanecer en lugares bien ventilados y con aquellas medidas que eviten que el sol haga de las suyas. Para ello, bajaremos persianas o echaremos las cortinas, para conseguir un ambiente más fresco, el llamado efecto cueva.
No hay que abusar de los aires acondicionados. Es preferible eliminar aquello que sea una fuente de calor como las bombillas que no sean LED, alfombras, o electrodomésticos que eleven la temperatura del ambiente.
6.-Ropa ligera- Importante que el cuerpo transpire, por lo que la ropa ha de ser fresca, linos y algodones suaves. Al aire libre cubrir la cabeza y proteger la piel, labios, orejas y pies.
7.-Hidratarse por fuera- Igual de importante que por dentro. Refrescarse mediante una ducha para conseguir que la temperatura corporal se regule.
Síntomas de un golpe de calor. Como identificarlo

Ya comentamos que, en muchas ocasiones, los golpes de calor no se ven venir ocultos tras las patologías propias de la edad, como pueden ser el cansancio y la debilidad.
Cuando una persona mayor sufre un golpe de calor suele manifestar confusión, desorientación, quejarse de dolor de cabeza, a veces acompañado con mareos y escalofríos.
Es importante tomarle el pulso. Si está acelerado, deberemos estar alerta pues es también un síntoma. La piel se enrojece y la persona se acalambra, fundamentalmente en las extremidades.
Como actuar ante una situación de golpe de calor en un mayor

Lo primero y por encima de todo es solicitar ayuda a los servicios de emergencia. La actuación de los profesionales es indispensable.
Mientras, podemos tumbar a la persona para que permanezca en esa posición en un lugar lo más fresco posible, levantarle las piernas para favorecer el retorno, levantarle ligeramente la cabeza y controlar su temperatura corporal.
Hidratarle por dentro y por fuera, con pequeños sorbos de líquidos y con paños empapados de agua para refrescar frente, parte posterior del cuello, axilas y las muñecas.

Las personas mayores en esta situación de calor y altas temperaturas, deben estar acompañados el mayor tiempo posible con el objetivo de que se cumplan los consejos para la prevención de situaciones de golpe de calor, que pueden llegar a ser muy peligrosos.
Si en el hogar no es posible por las circunstancias personales y la situación familiar, debe tenerse en cuenta las muchas opciones que los centros especializados ofrecen para evitar situaciones de riesgo y para favorecer su seguridad y tranquilidad.